Catalá ha asegurado que las administraciones no han sabido dar respuesta hasta hace muy poco tiempo a la violencia de género y en esa línea se ha referido a las reformas emprendidas por su Gobierno a lo largo de esta legislatura de las que se ha mostrado “moderadamente satisfecho”.
El titular de Justicia ha destacado el Estatuto de la Víctima del Delito aprobado el pasado mes de abril con amplia mayoría parlamentaria, en el que se anticipan las directivas comunitarias y se establecen las normas mínimas sobre los derechos, el apoyo y la protección de las víctimas de delitos, así como de familiares en los supuestos en los que éstas fallezcan.
En cuanto a la reforma del Código Penal, en vigor desde el mes de julio, ha destacado que aumenta los supuestos en los que es aplicable una medida de libertad vigilada a las víctimas de delitos de violencia física o psíquica habitual en el ámbito de la violencia doméstica e incluye el género como motivo de discriminación entre las circunstancias agravantes, tipifica el delito de acoso e introduce mejoras en los delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual.
El ministro se ha referido también a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial que incrementa los casos sobre los que pueden resolver los Juzgados de Violencia sobre la Mujer y al Real Decreto que modifica el régimen de tasas y el sistema de asistencia jurídica gratuita de forma que las víctimas no tengan que acreditar insuficiencia de recursos para litigar.
Entre las reformas de su departamento ha destacado asimismo la Ley de Jurisdicción Voluntaria, que introduce novedades en torno a los requisitos para contraer matrimonio y en materia de indignidad sucesoria que afectan a los supuestos de violencia de género, con el fin de otorgar una mejor protección ante estas situaciones.
